¿Qué es el bruxismo y cómo se trata?

Dental Implantes, clínica dental con sede en Móstoles (Madrid) y Gálvez (Toledo), os trae hoy un interesante artículo sobre uno de los problemas dentales más comunes y que cada vez afecta a más personas: el bruxismo.

¿Qué es el bruxismo?

El bruxismo es un hábito involuntario, ya que en la mayoría de los pacientes ocurre cuando duermen aunque también puede ocurrir despiertos, de apretar los dientes y moverlos de un lado a otro de ahí que se conozca también al bruxismo comúnmente como “rechinar de los dientes”. Este rechinar y la presión que se ejerce puede provocar dolores en las mandíbulas e incluso en la cabeza y obviamente, un desgaste de las piezas dentales por la continua fricción. E incluso, si persiste mucho en el tiempo y no se pone solución, puede provocar alteraciones de las articulaciones temporomandibulares.

Causas del bruxismo

El primer factor desencadenante del bruxismo es el estrés pero también pueden afectar otros factores como alineación inadecuada de los dientes, tipo de alimentación, hábitos en el sueño, etc.

¿A quién puede afectar?

El bruxismo no entiende de sexo, puede afectar tanto a hombres como a mujeres y suele aparecer los 15 y 25 años.

Síntomas del bruxismo

Como decíamos al inicio del artículo, es importante detectar a tiempo el bruxismo ya que, de no ser así, puede provocar alteraciones en la articulación temporomandibular.
Acude a tu dentista si tienes algunos de estos síntomas

• Rechinar de dientes sobre todo por la noche
• Dolor de los músculos faciales que incluso llega al cuello
• Molestias en oídos
• Sensibilidad dental a las cosas frías, calientes y dulces
• Desgaste dental

Tratamiento del bruxismo

El objetivo principal y más importante para el bruxismo es evitar que se sigan desgastando las piezas dentales y, más importantes, que la articulación temporomandibular se vea afectada. Es por ello que el tratamiento más eficaz es una férula o guarda de descarga. Esta férula, parecida a la que usan los boxeadores, es una prótesis ajustada que se coloca en la mandíbula superior durante la noche y evita el rechinar de los dientes.
Como podéis deducir, esto no hace más que evitar el desgaste dental pero no es la solución definitiva por lo que lo importante es que la persona que tiene bruxismo, sepa canalizar y controlar esa estrés y ansiedad que le hace rechinar los dientes.